Hola, soy Karelis Hernández, directora de WhatsApp.
Este mensaje es para informarles a todos nuestros usuarios que sólo nos quedan 530 cuentas disponibles para nuevos teléfonos, y que nuestros servidores han estado recientemente muy congestionados, por lo que estamos pidiendo su ayuda para solucionar este problema.
Necesitamos que nuestros usuarios activos reenvíen este mensaje a cada una de las personas de su lista de contactos a fin de confirmar nuestros usuarios activos que utilizan WhatsApp, si usted no envía este mensaje a todos sus contactos de WhatsApp, entonces su cuenta permanecerá inactiva con la consecuencia de perder todos sus contactos.
El símbolo de actualización automática en su SmartPhone, aparecerá con la transmisión de este mensaje.
Su SmartPhone se actualizará dentro de las 24 horas siguientes, contará con un nuevo diseño, un nuevo color para el chat y su icono pasará de ser verde a azul.
Whatsapp pasará a tarifa de pago a menos que seas un usuario frecuente. Si tienes al menos 10 contactos envía este sms y el logotipo se convertirá en rojo para indicar que eres un usuario frecuente.
Mañana empiezan a cobrar los mensajes por whatsapp a 0.37 centavos.
Reenvía este mensaje a más de 9 personas de tus contactos y te será gratuito de por vida fíjate y se pondrá azul la pelotita de arriba.
Menuda maravilla de mensaje.
Es posible que hace unos años recibieras este, o un mensaje similar.
Imagínate, la directora de WhatsApp se molesta en mandarme un mensaje a mí, para informarme que, o lo reenvío a 9 personas, o tendré que pagar por la aplicación.
Hay directivos que están en todo.
Pero independientemente sí te lo mando la directora de watsapp, o el grupo de papás del cole.
¿Qué hiciste?
¿Lo reenviaste o no?
No te preocupes que estamos entre amigos, y esto es como las Vegas.
Lo que pasa aquí, se queda aquí.
Da igual, si lo reenviaste o no.
Seguramente a ti, te llego varias veces el mensaje.
Así que podemos deducir que la gente mayoritariamente sí lo reenvió. (Incluido yo)
¿Por qué?
Si está clarísimo que tiene la misma credibilidad ese mensaje que ese email que te mandan diciendo que su marido ha muerto, y ha dejado una herencia de 20.000.000$ en una cuenta de Suiza, y que tú eres el afortunado.
Se reenvió tanto por la aprobación social.
La fuerza que tiene la influencia de los demás.
Me explico.
Cuando nos encontramos en una situación nueva para nosotros, que no sabemos muy bien cómo reaccionar, lo primero qué hacemos, es observar la reacción del resto de personas ante esa situación.
Y tomaremos nuestra decisión basándonos en lo qué hacen los demás.
No tienes claro en qué restaurante comer porque no conoces los de la zona, entrarás en el que más gente tiene y no el que está vacío.
Cuando no existían los navegadores en el coche y te perdías por una calle, seguías al coche de delante para que te sacara de allí.
Cuando vas a un concierto y no tienes claro dónde está la entrada, sigues a la multitud.
Por ese motivo se da tanta importancia a los testimonios en las webs.
Parece que, si tenemos dudas sobre un producto y vemos a alguien hablando bien de ese producto, ya nos da confianza.
Aunque no conozcamos de nada a esa persona.
Hoy se sabe que existe una gran manipulación de estos testimonios y reseñas.
Y no hablo de que en una web pongan una foto cogida de un banco de imágenes y ellos mismo escriban los mensajes del supuesto “Alejandro Martinez, CEO de alejandromartinez.com”
Hablo de las reseñas de amazon o de tripadvisor.
Solo tienes que poner en Google reseñas falsas, y verás la de gente que ha caído con esto.
La buena noticia es que podemos mostrar autoridad sin ninguna necesidad de inventarnos o poner reseñas y testimonios en nuestra web.
La mala noticia es que esto lo hacemos en las sesiones para repasar o hacer textos de webs de mis clientes.
Si tienes dudas, y quieres que repasemos o hagamos tus textos, pide tu consulta privada aquí, aquí o aquí.
Tu Dr. Pepe Persuasivo.
P.D. — ¿Qué te apetece beber?
— No sé, ¿entiendes de vino?
— Sí, mucho, de hecho, hice un cur…
— Para, para, una cerveza que paso de escuchar mierdas.