Guapo, Feo.
Blanco, negro.
Elegante, hortera.
Tortilla de patatas con cebollas, sin cebolla.
Pizza con Piña, Pizza sin piña.
Excepto lo de la pizza que debería estar penado por ley ponerle piña, el resto es relativo.
Resulta que ayer mi hija, con una diplomacia inexistente, y con cero filtros, va y me suelta:
— Papá, vas muy hortera así vestido.
Coño, con el diablo se viste de Prada.
En el momento en el que me lo dijo, me jodió.
Pero pasados 5 segundos, que son los que mis neuronas necesitan para procesar la información, pensé:
— “Es bueno, o es malo que ella me llame hortera”
No es lo mismo parecerle hortera a David Beckam, que a Bad Bunny.
La elegancia de Bad Bunny se la regalo toda a él.
Que me llamen hortera sus seguidores, significa que mis gustos a la hora de vestirme van por buen camino.
A nadie nos gusta que nos llamen horteras.
Al menos de primeras.
Luego ya filtraremos, y echaremos un ojo al que nos llame hortera.
Y dependiendo de su elegancia, nos preocuparemos o no.
Como todos los que estamos aquí, creo que nadie tiene que desfilar, o presentar su nueva colección en la fashion week de NY, por eso hablemos de copywriting que es lo que nos interesa.
Todos tenemos claro (o deberíamos) que no podemos atacar a todo el mundo, tenemos que saber a qué público nos dirigimos.
Pero ojo.
A veces, incluso filtrando nuestro mensaje, podemos estar dando un mensaje incorrecto.
Por ejemplo.
Imagina que tu público son los entrenadores personales y pones uno de estos textos:
Si estás empezando, y tu web no te genera las ventas deseadas, llámame.
Si tu negocio ya está en marcha, pero tu web no te genera las ventas deseadas, llámame.
En el primero el mensaje va enfocando a un nuevo emprendedor que posiblemente le sobra de todo menos la pasta.
En el segundo, ya va hacia alguien que ya tiene su negocio funcionando, que quiere crecer en el mundo digital, y es posible que quiera invertir para ello.
¿Ves la diferencia?
Es muy importante repasar los textos.
Si tienes dudas, y quieres que repasemos o hagamos tus textos, pide tu consulta privada aquí, aquí o aquí.
Tu Dr. Pepe Persuasivo.
P.D. — Te he componido una canción.